sábado, 17 de marzo de 2012


Sana Sana.

     Es un restaurante naturista. Por lo tanto, la confección del menú, la elección de los productos y las preparaciones, son mucho más concientes y estrictas que la de un restaurante vegetariano. Y un mundo de distancia respecto a un típico bodegón.
     
     La entrada es preciosa, con plantas colgantes, hay mandalas dibujados en las paredes, muebles antiguos, budas fuscias, detalles pintorescos por doquier, mucho colorido, y una música muy relajante, te dan ganas de quedarte horas, está todo el ambiente en armonía, te transmite mucha paz. Ideal para bajar un cambio al mediodía o ir a cenar en pareja para reconciliarte.
     
     El punto flojo está en los mozos y camareras. Fui 5 veces, y me atendieron tres varones y dos mujeres. Son muy amables y te saben explicar detalladamente cada plato (fundamental para un lugar así), pero descuidan la mesa. Es habitual que se olviden los aderezos, que no te vean cuando los llamás y que le resten importancia a tus reclamos. Las veces que comí en el entrepiso directamente me abandonaron, me dieron la carta, me trajeron la comida y no aparecieron por una hora, y como no está bueno gritar desde la baranda, tuve que interrumpir la comida varias veces y bajar para buscar al mozo.
     
     Para tomar siempre pido una jarra de los jugos que preparan ahí y varían según el día. El último era de naranja, limón, pera, durazno, jengibre, menta, salvia, cedrón y miel. Más de una vez escuché, “tiene gusto a remedio”, cosa que se disimularía si le pusieran más azúcar, pero si estamos buscando sabores artificiales hay que ir a otro lado y pedir una Coca Cola, acá se toman cosas naturales, que nos hacen bien y son ricas, está bueno acostumbrarse y darle tiempo a nuestro paladar atrofiado para que aprenda a disfrutarlas.
     
     En mis incursiones naturistas probé muchas cosas, las porciones son grandes, y la preparación principal siempre viene con una guarnición caliente y una variedad de hojas verdes con aderezos  a base de remolacha, zanahoria, miel y soja, etc. Todavía no probé los tragos que ofrecen de noche. Les cuento como estuvo todo y les dejo un consejo vital.

     Terrina tibia de cous cous y vegetales con chucrut: el cous cous es sémola de trigo, ingrediente básico de la comida del norte africano, que al estar compacto y bien hidratado, quedaba perfecto con los pimientos, la cebolla y la berenjena, todo bien dorado. El chucrut es una guarnición alemana, que consiste en repollo fermentado con vinagre o mucho tiempo en salmuera. La acidez equilibró muy bien el dulzor de la terrina.

     Hamburguesas de legumbres y vegetales asados: eran de lentejas y porotos aduki, bien armadas y suaves al morderlas, acompañadas por berenjenas, zucchinis, tomate y unos champignones y shitakes tiernos y sabrosos.

     Lasagna: en la mayoría de los lugares la arruinan calentándola en el microondas o la arman mal y sale fría del horno. Llegó muy atractiva, con queso gratinado, bien calentita en una vasija de barro. Mucho sabor en el puré de calabaza y la salsa de tomate. Muy reconfortante para el invierno.

    Milanesas de mijo y de soja con arroz yamaní: yo no las pedí, pero las probé igual. Soy de los que piensan que las milanesas de soja no tienen gusto, aunque tengan queso encima, estas por los menos eran caseras y no de cartón como las comerciales. Las de mijo son mejores, y el yamaní es más rico que el arroz neutro al que estamos acostumbrados, y tenía una salsita de tomate bien especiada.

     Croquetas de cereales y semillas con vegetales salteados al wok: la última vez que fui la camarera me dijo que había solamente dos opciones para pedir, ninguna me tentó, y vi en un pizarrón que las croquetas estaban como sugerencia del día y no me la habían ofrecido, le pregunté y me dijo que si. Era un plato principal, pero me las trajeron en un plato chiquito, de entrada, sin los vegetales salteados y sobre lechuga cortada. Se lo dije a la camarera y me respondió que, “siempre sale distinto, ven lo que tienen y le ponen”. Como siempre comía rico, decidí dejarlo pasar, mal yo, pensé que de última me llenaría con el postre, pero también había dos opciones que no me tentaron, seguramente había quedado mal predispuesto y nada me iba a conformar.

     Torta de naranja y miel: un bizcochuelo húmedo, con los dos sabores persistentes, bien equilibrados, y cascaritas confitadas de naranja de sorpresa. También una porción generosa.

     Alfajor de algarroba, chocolate, coco y frutos rojos: era seco, no tenía un sabor que se disfrutara, el coco estaba a los costados como en los de maicena, y de frutos rojos solo había un pedacito de la piel de una frutilla, para lo cual la explicación oficial fue, “la frutilla tiene azúcar, y el azúcar es cancerígeno”. Fue una respuesta naturista muy sensata, pero yo me había ilusionado con los frutos rojos.

     Batido de Baileys: el clásico licor cremoso irlandés es inmejorable, porque combina buen whisky, chocolate, vainilla y caramelo, entre otras cosas, pero esta versión fue superior. No se si le agregaron leche condensada, helado o qué, pero estaba exquisito, suave y espumoso, además barato. Tendría que ser una fija en la carta.

     Coman todo junto. Por ahí la milanesa de mijo no conforma, el zucchini asado no tiene onda y la ensalada con brotes de alfalfa y lechuga parece insulsa, pero si comen todo mezclado, en un solo bocado, los sabores se potencian y es riquísimo, porque además, las temperaturas  y las texturas contrastan. Es una explosión de sensaciones en la boca. Yo hago eso con todos los platos, y siempre funciona.

     Si van a ir, bien open mind por favor. Es interesante y divertido. Los productos son hiper frescos, cocinan rico y la comodidad que generan te hace sentir bien. De lo mejor de Rosario.

4 comentarios:

  1. Uh increíble! Me tentaste! Tengo que probar. Pregunta: ¿Es caro?
    Quiero probar el couscous y ese batido de Bailey's. Tengo miedo de que lo hayas hecho sonar mejor de lo que es jajaja

    ResponderEliminar
  2. Agrego; lo mejor de su web (además del buen diseño, la música buena onda y todo)... tienen precios!

    ResponderEliminar
  3. bueno Mati, como veras aca estoy comentandote el blog!!!!!!!!!!!!!!!!! la verdad muy bueno el lugar, para personas vegetarianas!!! lo unico q me atrajo fue el batido de baileys.. pero muy buena opcion para una persona como Emi, x ejemplo, o como Sofi, o como vos..
    pd: emilia comento 4 palabras, 4!!! eso vale? jajaja

    ResponderEliminar